José Clemente Orozco

José Clemente Orozco nació el 23 de Noviembre de 1883 en la Zapotlán, actual Ciudad Guzmán, en el Estado de Jalisco. Se graduó de la Escuela Nacional de Agricultura y más tarde estudió matemáticas y dibujo arquitectónico. Su familia decidió que debía estudiar algo que le sirviera para administrar sus tierras, por lo que estudió la carrera de ingeniero agrónomo. Fue controversial el ir en contra del destino profesional que le tenía planeado el entorno familiar, porque no satisfacía sus aspiraciones. En 1909, afrontando su combate interior hacia el talento artístico, decidió dedicarse a la pintura y comenzó a estudiar en la Academia de Bellas Artes de San Carlos.

De 1911 a 1916, a fin de conseguir ingresos económicos que le permitieran dedicarse a su vocación, colaboró como caricaturista en algunas publicaciones y realizó una serie de acuarelas acerca de la vida en los barrios bajos de la capital mexicana. Su obra de esta etapa muestra una tendencia expresionista. Fue en estos años cuando realizó su primer cuadro de grandes dimensiones, Las últimas fuerzas españolas evacuando con honor el castillo de San Juan de Ulúa (1915) y su primera exposición pública en 1916. Esta exposición mostró cientos de pinturas, acuarelas y dibujos inspirados en prostitutas que retrató con compasión, apostando a la crítica social. Esta etapa muestra una conexión con el pintor francés Toulouse-Lautrec, pintando para “la gente de la calle” el ambiente de los cafés, cabarets y casas de mala nota.

En el año 1922, José Clemente Orozco se unió a Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros para iniciar el movimiento muralista mexicano, llenando de monumentales obras las ciudades del país con una ideología izquierdista. Sus creaciones se basan en las fuentes del arte precolombino y las raíces populares mexicanas, en un estilo educativo que expresa sus preocupaciones políticas y sociales.

En un gesto ejemplar, exigía por su trabajo una remuneración equivalente al salario de cualquier obrero. Orozco retrató con maestría la tragedia y el heroísmo de la historia mexicana. Su obra es profundamente dramática en contenido, criticando los eventos históricos, sociales y políticos de México con una expresividad violenta y desgarradora. Su obra está claramente influenciada por las características que se practicaban entre los muralistas mexicanos de su época con vocación pedagógica, política y social. Estaban convencidos de educar a las masas populares, incitándolas a tomar una conciencia revolucionaria y nacional, por lo que los artistas buscaron un lenguaje plástico directo, sencillo y poderoso.

En 1928 el artista empezó un viaje por el extranjero. Primero se dirigió a Nueva York para presentar sus Dibujos de la Revolución, gracias al notable éxito de esta exposición, le fue comisionado pintar murales para el Colegio Pomona de California, Dartmouth College y New School for Social Research de Nueva York. Esta última es un verdadero fresco, pintado sobre yeso húmedo y fue el primero de ese tipo hecho en Nueva York. Los ingresos obtenidos de estos dos trabajos le permitieron realizar el viaje de sus sueños a Europa. Permaneció en España, Inglaterra e Italia, dedicado a visitar museos para estudiar las obras de los más destacados pintores.

Cuando regresó a México, continuó realizando numerosos murales, especialmente en el Palacio de Bellas Artes y la Universidad de Guadalajara. En 1940 el Presidente Cárdenas le comisionó decorar el nuevo edificio del Tribunal Supremo de México. Su obra también se puede admirar en la residencia del gobernador y capilla del Instituto Cultural Cabañas, antiguo orfanato de Guadalajara, Jalisco.

Murió en la Ciudad de México el 7 de septiembre de 1949, sus restos fueron enterrados en la Rotonda de Hombres Ilustres, en la capital de Jalisco.

Artículo Producido por el Equipo Editorial Explorando México.
Copyright Explorando México, Todos los Derechos Reservados.
Fotografía: Wikipedia.org