Museo José Luis Cuevas
Ubicado en la calle de Academia numero 13, entre las calles de Moneda y Guatemala en el centro histórico de la Ciudad de México, en un lugar que parece conservarse en el tiempo se encuentra el museo José LuÃs Cuevas.
Habilitado en el siglo XVII y reedificado por Manuel Tolsá en 1798, en lo que anteriormente fuera el convento de Santa Inés, este museo da hogar a importantes obras de fama internacional y que fuesen donadas al museo por el pintor, quien dio su nombre al recinto ahora como museo. José Luis Cuevas donó 1600 de sus obras que están integradas por las de su propia autorÃa como las de artistas latinoamericanos y europeos.
Colocada en el patio, como guardiana y desde el centro, se abre paso a los visitantes la majestuosa escultura que lleva por nombre La Giganta-El Gigante. Tiene una altura de ocho metros de alto y pesa más de ocho toneladas, teniendo a sus pies un espejo de agua, obra del maestro José Luis Cuevas.
Al mirar con detenimiento puede descubrirse un rostro colocado estratégicamente en la rodilla derecha de La Giganta. El museo presenta, en su colección permanente, la maravillosa muestra del maestro Cuevas en la que puede apreciarse dibujos, pinturas y esculturas, asà como obras otro gran maestro, Pablo Picasso, además de muestras de la calidad artÃstica de diferentes autores.
El erotismo es uno de los temas más abordados por el maestro, lo que es evidente en la exhibición de Diarios eróticos de José Luis Cuevas, entre las que se observan tintas, cajas, acuarelas, objetos personales, y fotografÃas.
El maestro cuevas acepta que siendo muy pequeño el interés por observar la prostitución de mujeres en las calles de la colonia San Miguel, su lugar de residencia en ese entonces, le proporcionaban, excitante atracción la cual plasmaba en dibujos.
Durante su vida artÃstica y siendo el autor de Animales Impuros, el pintor manifiesta su obsesión, fantasÃa, pasión, desilusión y su enorme afecto por la vida en cada una de sus obras. Para él, Eros es lo que mueve al universo, creando en éste un cosmos en el que se celebran todos los sentidos, antecesores de la creación.
En 1933 se abrió la Sala Erótica y lleva el nombre de André Pieyre de Mandiarques, donde ha mantenido el original de la obra de 35 dibujos de acuarela, sitio donde el maestro Cuevas expande y profundiza su intimidad. Presenta un tributo a Eros que adquiere forma y figura por medio de su esposa Beatriz, la cual fue su gran fuente de inspiración, y quien ha participado de manera activa en la serie de pinturas eróticas.
En otra de las salas, la AlaÃde Foppa se presentan la técnica de acrÃlico junto a telas de gran formato, esculturas elaboradas en el año de 2004. Dentro del museo pueden visitarse también la Biblioteca y Centro de Documentación Octavio Paz.
Con un horario de martes a domingo de 10 de la mañana a 6 de la tarde el museo abre sus puertas para que los visitantes descubran las maravillas que en él se alojan.
ArtÃculo producido por el Equipo Editorial Explorando México.
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Foto: ecultura.gob.mx
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