Valle de Bravo se rodea de una gran cadena montañosa, la cual contrasta con la dimensión de su lago artificial, donde cada año, cientos de turistas acuden a practicar todo tipo de deportes acuáticos, como esquí, velero, kayak y pesca. Cuenta con una importante infraestructura turística que ofrece cómodos hoteles resorts, restaurantes mexicanos e internacionales, un club hípico y agraciados campos de golf.

Este Pueblo Mágico se localiza a tan sólo 65 kilómetros al este de la capital del estado de México y a 145 kilómetros de la Ciudad de México. Ofrece un lugar de descanso y tranquilidad que se percibe desde sus calles empedradas y fachadas de estuco blanco, adornadas con balcones de hierro forjado y techos de teja roja. En los portales de su plaza se pueden disfrutar deliciosas nieves artesanales, antojitos típicos y otros platillos distintivos del Valle, como la trucha arcoiris, la lobina negra y las alcachofas que se cosechan en esta región del estado.

En su popular mercado de artesanías se encuentran numerosas galerías de arte, boutiques de ropa y de decoración. La Parroquia de San Francisco, patrono del lugar, destaca por su original campanario del siglo XVI, digna de una visita relajada para disfrutar de su belleza colonial.

Cerca de Valle de Bravo están el Parque Natural Bosencheve y la Reserva de Monte Alto, ideales para practicar todo tipo de deportes de aventura, como montañismo, escalada en roca, ciclismo y campismo, así como el vuelo libre en ala delta y parapente; actividades extremas que, en los últimos años, han hecho de esta población mexiquense, el destino favorito para los amantes de la adrenalina.

FESTIVAL INTERNACIONAL DE MÚSICA Y ECOLOGÍA DE VALLE DE BRAVO
Este festival busca, mediante diferentes expresiones artísticas, sensibilizar sobre la necesidad de valorar y conservar la belleza natural y cultural de este hermoso valle. A partir de 2002, el Festival Internacional de Música y Ecología de Valle de Bravo incluyó como una de sus prioridades la conservación de esta cuenca hidrológica, desde entonces se apoyaron proyectos que han contribuido significativamente a la conservación del lago, bosques y el desarrollo comunitario. El Festival ha apoyado programas de educación ambiental y proyectos productivos que den alternativas económicas al aprovechamiento del bosque sin afectar su sistema ecológico.